Es notable que nuestra tasa de encuentro fue mucho más alta en las plantaciones agroforestales que en los bosques secundarios. La aparente selección y mayor frecuencia de uso de los agroforestales sobre los bosques secundarios por parte de las carachupas en nuestra área de estudio merece una investigación más profunda. Sin embargo, proponemos que las carachupas pueden ser más abundantes en las plantaciones agroforestales en función de una mayor disponibilidad de recursos (alimentos) y una cobertura vegetal adecuada en comparación con los parches de bosque. La relativamente baja densidad general estimada de D. marsupialis en nuestra zona de estudio puede relacionarse a la presencia de perros domésticos (Canis familiaris) y otros depredadores menos comunes, como los ocelotes, Leopardus pardalis. Los residentes locales de la comunidad suelen emplear perros domésticos para la caza, pero sólo ocasionalmente matan carachupas con fines medicinales (C. Benavides, obs. pers.). Sin embargo, en nuestras observaciones pudimos constatar que cuando los perros se dejan solos en los cultivos, cazan para comer, y hemos confirmado que sus presas incluyen a la carachupa. Los individuos de D.Marsupialis también son matadas por los granjeros cuando se las encuentra cerca de sus casas, porque ocasionalmente se alimentan de aves de corral. Sin embargo, los agricultores no las consideran un gran problema (C. Benavides, obs. pers.). Las investigaciones futuras también deben centrarse en el efecto de la depredación en las poblaciones de carachupa. Para obtener más información sobre los métodos y resultados, lee el artículo completo aquí: